Gente con copas de más

Cuando la gente se entrega a la fiesta, se entrega. Y una vez metidos en faena, no es fácil ver l momento de dejar de beber.

Es muy fácil pasar del estado de euforia al estado de inconsciencia, y cualquier sitio donde unos minutos antes la estabas preparando, ahora es un sitio perfecto para echar una cabezadita.

Una vez más desde aquí recomendamos beber con moderación y si no es así, hazte fotos!